La suelta de ácaros presa favorece el control biológico en el cultivo de cucurbitáceas
IDEAL – 29 Noviembre de 2017
El Departamento de Desarrollo de Agrobío lleva varios años trabajando en un proyecto dirigido a mejorar la efectividad del control biológico en cucurbitáceas, unos cultivos que, hasta la fecha, se encuentran rezagados en la implantación de estás técnicas respetuosas con el medio ambiente para luchar contra las plagas que afectan a los cultivos en invernadero.
Representa una de las líneas de desarrollo en las que más avanzó últimamente Agrobío, con su propuesta de sueltas de ácaros presa. En este punto, está continuamente, dada la demanda, realizando charlas para agricultores en cooperativas y otros puntos de encuentro con el objetivo de mostrar los avances que se están registrando al respecto y que impulsan la mejora del protocolo del control biológico en el cultivo de cucurbitáceas, segmento en el que hasta la fecha menos implantación tiene la técnica en plantaciones bajo abrigo de la provincia. Así, se abre un amplio abanico de posibilidades de mejora, no sólo en pepino, cultivo en el que se han desarrollado la mayor parte de los ensayos, sino también en calabacín, melón, sandía y otros productos.
Las dificultades con las que se encuentran los profesionales a la hora de mantener la población de fauna auxiliar una vez realizadas las sueltas han sido determinantes. No obstante, con la suelta de ácaros presa para alimentar a los ‘bichitos buenos’ está dando un giro en los cultivos con menor incidencia en control biológico.
En Agrobío se les ocurrió alimentar a los depredadores en el campo con los ácaros que utilizan en la fábrica. Después de diferentes pruebas para determinar la fórmula más efectiva determinaron las sueltas en las hojas de la planta a través de un sobre. Los depredadores van encontrando comida, si no hay plagas para alimentarse. Además, facilita la acción de la fauna auxiliar en aquellos puntos de la explotación que más interese a los productores ya que con las sueltas de ácaros presa pueden ir dirigiendo las concentraciones de auxiliares en el invernadero.
Los ensayos realizados en finca han avalado esta técnica, y ya se ha extendido en el campo de Almería en cultivos, principalmente de pepino. No obstante, es aplicable «en plantas ornamentales, aromáticas, calabacín, berenjena, frambuesa, fresa» y también «se puede utilizar en muchos otros productos, entre ellos esta técnica es efectiva para la implicación del control biológico en cultivos de melón y sandía». Además, también se obtienen buenos resultados con esta técnica en cultivos al aire libre, tales como cítricos o frutales. En producciones bajo abrigo, la técnica se llevó a cabo ya la pasada campaña en pepino de ciclo corto, tanto de otoño como de primavera, así como en ornamentales, donde está ofreciendo excelentes resultados.29
CULTIVO ECOLÓGICO
Para el cultivo en ecológico, que poco a poco se consolida al alza en la provincia de Almería, en sus plantaciones bajo abrigo, se mejora con esta técnica el control biológico indispensable para este tipo de agricultura. Precisamente, otra de las líneas en las que está trabajando Agrobío está vinculada a este segmento de cultivos, y se centra en la lucha contra el pulgón, una plaga que preocupa mucho a los productores. En Murcia, por ejemplo se han dejado de cultivar muchas hectáreas de sandía al aire libre como consecuencia del pulgón. Todo está basado en «control preventivo», explica Ana Belén Arévalo, técnico del departamento de Desarrollo de Agrobío.
«Hemos visto, como manejo adecuado, el de las plantas de cereal que se utilizan para hacer infestaciones de parasitoides de forma previa, antes de que llegue la plaga». Y es que el pulgón cuenta con dos enemigos naturales, por un lado el parasitoide, que pone sus huevos dentro del pulgón, y el depredador que lo utiliza como alimento. De esta manera, con una infestación preventiva con parasitoides controlas la plaga, y ese control se refuerza una vez se lleven a cabo las sueltas de depredadores. Se crea una biofábrica dentro del invernadero, en la que conviven parasitoides, pulgones buenos que actúan como depredadores y que son inofensivos para el cultivo, y otros enemigos naturales que se ven atraídos, que llegan desde el exterior.
Si se hace un buen control biológico preventivo el agricultor puede estar tranquilo, porque cuando se detectan los focos de plaga ya está todo controlado. Pero es muy importante, seguir paso a paso el protocolo sin descuidar ningún detalle.
En Agrobío, en las plantaciones ecológicas en las que están trabajando, plantan el cereal una semana antes de introducir la planta hortícola en el invernadero. De esta forma, para el momento del trasplante, ya se hacen las sueltas de pulgones buenos y en una semana ya hay una nutrida población en acción.
CONTROL BIOLÓGICO CONSERVATIVO
Es un proyecto a largo plazo en el que trabaja Agrobío, en colaboración con centros de investigación tales como la Estación Experimental de Cajamar y el Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (Ifapa). La investigación está llevando a determinar una amplia selección de plantas, principalmente autóctonas, que actúan como refugio de la fauna auxiliar. Además de desarrollar este tipo de plantaciones en el interior del invernadero, se diseñan también setos en el exterior, para que actúen como barrera ante la llegada de las plagas.
Fuente: JOSÉ ESTEBAN RUIZ / IDEAL / ALEMRÍA
Etiquetas:agrobío, calabacín, control biológico en pulgón, control biológico preventivo, fauna auxiliar, melón, parasitoides, pepino, sandía, Suelta de ácaros presa
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