El pulgón es una plaga que causa cada vez más problemas en los cultivos hortícolas bajo abrigo y al aire libre; y en melón y sandía es muy importante su rápida detección.
¿Qué parasitoides y depredadores actúan contra el pulgón en sandía y melón?
Los parasitoides y depredadores que se utilizan para el control de pulgón en sandía y melón con mejores resultados son Aphidius sp. (A. colemani, A. matricariae, A. ervi, A. abdominalis, etc.), Aphidoletes, crisopas, sírfidos y mariquitas. Estos alcanzan su máxima eficacia en estrategias preventivas.
Los cultivos de melón y sandía en los invernaderos son ciclos muy cortos en los que el desarrollo del cultivo es muy rápido. Pero también lo son la evolución de las plagas y de las poblaciones de enemigos naturales.
Estos cultivos suelen trasplantarse en los meses de invierno, justo después de arrancar el cultivo del ciclo de otoño. Las poblaciones de trips en los invernaderos en estas fechas son las más altas del año, debido al arranque de cultivos y a que el desarrollo de Orius se frena durante el invierno, por la falta de polen y las condiciones adversas.
Muchos invernaderos comienzan una nueva campaña agrícola. Las zonas más tempranas ya tienen establecidos los auxiliares y muchos de los cultivos de otras zonas ya están trasplantados.
A continuación mostraremos algunas de las estrategias más importantes a tener en cuenta para el manejo del control biológico.
Realizar un buen manejo de la fauna auxiliar durante estos meses de primavera dedicados a melón, sandía, pepino y tomate será fundamental para romper el ciclo de las plagas, obtener productos seguros, y llegar a la siguiente campaña con el campo lo más limpio posible.
El control de la polilla del tomate, la tristemente célebre Tuta absoluta, está resultando cada vez más difícil para los agricultores. La responsable de Desarrollo en Campo de Agrobío, Ana Belén Arévalo, explicaba en SER Agricultor (Cadena SER Provincia de Almería) que “la pérdida de eficacia de los productos registrados, provocada por el uso de las mismas materias activas para el control de las larvas, ha desembocado en una situación crítica en el control de esta plaga”.
Desde su punto de vista, integrar todas las herramientas disponibles para el control de esta devastadora plaga es fundamental. Arévalo sostiene que “la producción integrada y el control biológico, como herramienta principal contra las plagas, es la solución si queremos enfrentarnos a los daños causados por la Tuta. En este sentido, la especialista de Agrobío recuerda que el objetivo es que los agricultores sigan cultivando tomate, no sólo en Almería sino en toda Europa, ya que el problema de Tuta se extiende a muchos países.